Así lo afirmó a El País el presidente del sindicato, Gregorio Techera, quien agregó que “no puede ser que aquí hayan ciudadanos de primera y de cuarta. Que a algunos los hagan bajar y firmar papeles y a esta señora no”.
Rousseff llegó a Uruguay cerca de las 15:00 horas en una delegación de dos autos que se detuvieron para dar los documentos correspondientes al personal de Migración, para luego seguir la marcha sin que Aduana examinara los vehículos, según pudo constatar El País.
El funcionario de Migración 2, dijo a El País que previamente se había establecido un acuerdo para que en su ingreso a Uruguay no se le exigiera que bajara del vehículo o que se examinaran los autos, como se hace rutinariamente.
Además se supo que un integrante de la delegación se adelantó hasta las dependencias de Migración, levantó los documentos que tendrían que ser llenados y regresó al restaurante donde Rousseff estaba almorzando.
La expresidenta firmó los papeles, los cuales fueron luego entregados a los funcionarios uruguayos cuando estaban pasando los vehículos.
Según Techera, “podrían haber ingresado a cualquier persona o cualquier artículo y no pasa nada”.
Intensa agenda en Uruguay.
Rousseff también participará de la marcha previa al acto, convocada por el Pit-Cnt, que irá desde la Plaza de los Treinta y Tres Orientales, en 18 de Julio entre Magallanes y Minas, hasta la Plaza Libertad.
El acto se realiza en el marco de un paro que se realizará entre las 9:00 y las 13:00 horas, debido al trancazo en las negociaciones en los Consejos de Salarios (hasta ahora han acordado seis de 102 grupos, según el ministro de Trabajo Ernesto Murro) y en el marco de la Jornada Continental por la Democracia y contra el Neoliberalismo.
Además de ser la oradora principal, en conferencia se informó que además Rousseff recibirá las llaves de la ciudad de Montevideo.
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